El termómetro digital está diseñado para medir la fiebre en los niños en sólo 30 segundos. Dispone de una punta flexible que garantiza la seguridad y la delicadeza al medir la fiebre bajo la lengua, bajo la axila o por vía rectal. Una vez finalizada la medición, una alerta sonora avisa de que la medición se ha realizado correctamente y se apaga automáticamente después de su uso.